La Inspección Técnica de Vehículos o ITV es aquella revisión que tienen que pasar todos los vehículos cada cierto tiempo. Este tiempo varía en función de la antigüedad del vehículo y la revisión se lleva a cabo en las estaciones homologadas para ello.
¿Por qué es importante pasar la ITV?
En primer lugar, pasar la ITV es importante tanto para tu seguridad como para la del resto de conductores. Según los estudios, hasta en un 6 % de los accidentes están involucrados vehículos con algún tipo de fallo técnico.
Por otra parte, conducir con la ITV caducada te supondrá una multa de 200 euros. Por otra parte, si circulas con la ITV denegada, la cuantía de la multa asciende hasta 500 euros.
¿Qué se mira durante la Inspección Técnica de Vehículos?
Las diferentes partes que se revisan durante la ITV son:
– Estado de la carrocería, del paragolpes y de la matricula y del interior del habitáculo.
– Que el número de bastidor coincida con el de la documentación presentada.
– Las luces, que, además de funcionar, deben estar reguladas a la altura correspondiente.
– Funcionamiento adecuado de los cinturones de seguridad.
– Funcionamiento del claxon, del velocímetro y de los testigos de fallo de motor y airbag.
– Que las puertas estén en buen estado y tanto estas como las ventanillas correspondientes puedan ser abiertas.
– Estado de los espejos retrovisores. Deben estar homologados y, correctamente, fijados.
– La luna delantera no puede presentar roturas en el lado del conductor y ha de estar homologada.
– Estado de los neumáticos. Estos no pueden estar más desgastados de lo que permite la le ley. Es decir, su dibujo debe tener al menos 1,6 mm de profundidad.
– Estado de los frenos. Se revisan tanto la potencia de frenado como el equilibrio.
– El funcionamiento correcto de las suspensiones.
– Que no existan fugas de aceite o gasolina.
– Por ultimo, también se revisa que las emisiones de gases se encuentren dentro de los valores permitidos, además de realizarse la revisión del catalizador y tubo de escape.